Si el mes pasado era Bush el que tenía que tirar de reflejos para evitar que un par de zapatos aterrizaran en su cara durante una rueda de prensa en Irak. Ayer fue el Primer Ministro chino Wen Jiabao el que presenció un intento de ataque similar contra su persona cuando estaba dando una conferencia en la prestigiosa universidad británica de Cambridge.
El asaltante, un joven de 27 años, que fue inmediatamente retirado de la sala, lanzó una de sus zapatillas al mandatario chino a la vez que le gritaba acusándole de dictador.
Pero los incidentes han sido ligeramente distintos. Veamos por qué.
Para empezar, en Irak, el hecho de lanzarle los zapatos a alguien es un insulto reconocido culturalmente, mientras que el joven inglés sólo se limitó a emular el mismo acto, que para los británicos carece de significado.
Además, el periodista irakí resultó tener mejor puntería que el inglés, ya que Bush tuvo que apartarse para esquivar los proyectiles con rápidos movimientos, mientras que el británico estuvo poco certero y su calzado acabó a más de un metro de Wen, por lo que el Primer Ministro Chino ni siquiera se inmutó más allá de poner cara de circunstancia durante breves segundos, antes de seguir con su discurso como si tal cosa.
Mas allá del hecho en sí, está la diferencia de trato que el gobierno chino ha dado a ambos incidentes. Mientras que la prensa china se permitió el lujo de bromear cuando le ocurrió a Bush, parece que se les han pasado las ganas de bromas cuando el blanco ha sido su propio Primer Ministro.
Una portavoz del gobierno ha tachado de despreciable el asalto, pero ha asegurado que el gobierno británico ya se ha disculpado y que este tema no influirá en las relaciones bilaterales.
Mientras tanto el desafortunado joven, que en mi opinión no debería intentar ganarse la vida ni como francotirador, ni tan siquiera como de lanzador de dardos, está a la espera de presentarse ante un magistrado de Cambridge la semana que viene acusado de ofensa pública, según informa la BBC.
Lo que está claro es que si la tendencia sigue así, puede que estemos ante una nueva y revolucionaria modalidad Olímpica. Y es que pensándolo bien, a lo mejor es que los británicos se están preparando para presentarlo como nuevo deporte en Londres 2012.
En tal caso, ¿Quién se llevaría el Oro?, ¿Estarían permitidos los zapatos de tacón?, y es más ¿Qué político usarían como diana?
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