martes, 4 de noviembre de 2008

La crisis. Cap 2: La cigarra y la hormiga ¿Quién es quien?

Si ayer veíamos de donde viene la crisis, de una espiral de desconfianza e incertidumbre en los bancos y los inversores, a raíz de la crisis de las subprime, que ha dejado el sistema financiero sin liquidez; Hoy, desde la situación en la que nos encontramos, veamos a quien le va a afectar más, y quien está más resguardado (que no a salvo) de la tormenta financiera.


Según los expertos, en esta crisis, al ser de carácter global, serán los países menos globalizados, aquellos que no se verán asolados por el huracán del credit crunch. Cuanto menos desarrollados estén sus sistemas bancarios y financieros, y más reservas de efectivo tengan, más segura será su posición frente al desastre.


Hay incluso un grupo de países, que por sus condiciones excepcionales, se presentan con casi inmunidad al declive financiero mundial. Entre estos países se encuentran Timor Oriental, Angola e Irak. Este último no sentirá la presión, debido a la especial situación de su economía, que se enfrenta a la reconstrucción tras la inacabada guerra.


Estos mismos expertos en economía mundial, separan los países afectados en prestatarios y prestamistas. Según esta división, serán las naciones prestatarias, aquellas que se han dedicado a pedir más dinero prestado (EE.UU. Reino Unido, Islandia o España entre otros) los que más duramente sufran los efectos del tsunami financiero; mientras que los prestatarios, aquellos cuyo rol se ha basado en prestar, más que en recibir (China, Oriente Medio o Rusia) no estarán situados en el ojo del huracán, sino en las afueras del mismo. Les llegarán vientos de tormenta, pero sus hogares se verán menos devastados.


Si hablamos de grandes zonas: EE.UU y Europa estarían en el núcleo, dejando a América Latina, África y Asia, fuera de la zona cero.


Todo esto dicho de otra manera: Las naciones se pueden dividir entre las que han vivido a base de créditos (como EE.UU. por poner un ejemplo cabeza de grupo), y los que cuentan con una cultura del ahorro (como China).


Esto me recuerda, de alguna manera, a la fábula de la cigarra y la hormiga: mientras que China ha ido poco a poco guardando reservas para los malos tiempos, EE.UU ha estado tocando su guitarra del crédito sin preocuparse del frío que iba a llegar. Ahora, cuando soplan vientos gélidos, la hormiga china está resguardada al calor de su despensa llena, mientras que la cigarra americana está tiritando, lamentándose por sus errores y buscando desesperadamente una manta que le abrigue.


Esta reserva de efectivo es uno de los motivos por los que China es un caso especial y se encuentra en un puesto excepcional en relación con la situación financiera mundial, y en cuanto a cómo puede sobreponerse a ella. Pero hay muchas otras razones.


De hecho puede ser que este país asiático consiga, sorprendentemente, sacar algo bueno de todo esto.


Pero en estos detalles ahondaremos en el tercer y último capítulo, dedicado especialmente a China y a su situación específica en esta crisis global.


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