Corre Fan, Corre

El gobierno Chino está elaborando un borrador de lo que será la nueva regulación estatal para la ética de profesores de primaria y secundaria. Esta revisión del texto original que entró en vigor en 1997 se está llevando a cabo a raíz de un curioso, por no decir lamentable, suceso que tuvo lugar durante el mortal terremoto de Sichuan el pasado 12 de Mayo.

“Corredor Fan” como ya se conoce en todo el país a Fan Meizhong, es un licenciado en Historia por la universidad de Pekín que ejercía como profesor en un colegio de la provincia de Sichuan cuando se desencadenó el seísmo. En ese momento Fan se encontraba en clase con sus estudiantes, y su primera reacción fue correr a lo Forrest Gump dejando a sus alumnos atrás si preocuparse por lo que le pudiera ocurrir a sus pupilos.

Ampliamente criticado, no solo por sus actos si no por sus declaraciones posteriores, “Corredor Fan” se defiende diciendo que no hay ninguna regulación que diga que el profesor debería intentar salvar a sus alumnos por encima de su propia seguridad y poniendo en peligro su vida. Y añade que su fe en el liberalismo (no se que libros sobre liberalismo habrá leído este) le hicieron priorizar su vida frente a la de los demás, incluso frente a la de su propia madre. Que lástima ser madre de este vástago desagradecido, pero ya lo dice la sabiduría popular: “Cría cuervos y correrán dejándote a tras para que se te trague un terremoto”.

Los internautas chinos se han indignado ante estos comentarios que achacan a una violación directa y de los valores tradicionales chinos y aseguran que semejante acción egoísta insulta a todos los profesores que pusieron su vida en peligro por salvar a aquellos que estaban bajo su cargo. Pero es que no queda ahí la cosa, Fan además ha dicho que se supone que por ser profesor, en caso de desastre, debería intentar salvar a los niños porque son el grupo más débil, pero que cuando acontece un terremoto él también es débil y aprecia su vida más que otra cosa. O en otras palabras, y citando a Goma Espuma, que es un “cobarde, gallina, capitán de las sardinas”.

El caso es que para enmendar esto y para que, en futuras ocasiones que se espera que nunca lleguen, nadie pueda decir que una regulación no estipula que cuando sucede una desgracia el proceder adecuado de un profesor no es salir corriendo y gritar “Tonto el último”, el gobierno ha revisado la regulación actual cambiando un par de cláusulas y deshaciéndose de otras reduciendo las ocho existente a seis. Entre las actuales la tercera dice que “proteger a los estudiantes y velar por su seguridad es una responsabilidad moral del profesor” y que el profesor debe ser un “buen mentor y un amigo servicial”. En otras palabras: estás a cargo de un grupo de niños, son tu responsabilidad, en caso de emergencia ayuda, no huyas.

En el fondo, “Corredor Fan” ha tenido suerte, porque, aunque ninguno de sus alumnos le siguió, cosa que no me extraña, ya que estarían todos en estado de shock pensando horrorizados “Pues si este es el ejemplo que tenemos que tomar en la vida vamos apañados” el caso es que el colegio de este Forrest chino no se derrumbó, lo que le ha salvado de un linchamiento popular y una sentencia a muerte asegurada. Lo peor, es que seguro que la próxima vez tampoco se lo piensa dos veces antes de darse a la fuga cuando empiece a oír en su cabeza aquello de: Corre Fan, Corre.