La Viga en el Ojo Propio

Como ya comenté hace días en el post desde que las preguntas sobre el terremoto se han vuelto políticas y por ello incómodas para el gobierno, Pekín ha empezado a responder con sus acostumbradas maneras: no ha dejado a los padres manifestarse pidiendo una explicación por la muerte de sus hijos, ha vetado a los medios de comunicación de los lugares de la catástrofe ejerciendo su ya conocida censura.

De hecho hace unos días, por poner un ejemplo, un periodista belga fue detenido durante unas horas y después escoltado fuera de la provincia de Sichuan, cuando estaba haciendo una entrevista a unos padres que habían perdido a sus hijos en una de las numerosas escuelas derrumbadas durante el terremoto, se cree debido a un caso de corrupción, en el que estarían implicados cargos del gobierno, y por el que se construyeron edificios de mala calidad que sucumbieron a la embestida del seísmo. A los padres tampoco se les ha dejado acercarse a las ruinas de los colegios. Pero por supuesto, los periódicos chino no hablan de esto.

Pero como ya he dicho también en otras ocasiones, antes de criticar lo ajeno, hay que reconocer lo propio, y de eso mismo quiero hablaros hoy, de la viga en el ojo propio, que aunque con otro corte, sigue siendo grande, sigue siendo peligrosa, y a todas luces y con todas las letras, sigue siendo censura.

Pues bien, la historia es la siguiente: publicaba ayer el 20 minutos, no es que las informaciones de este periódico sean muy de fiar, y la información y la redacción de calidad, pero lo que me interesa es el material gráfico del que acompañaban la noticia, pues titulaba el 20 minutos: “Telemadrid censuró por escrito los abucheos a Esperanza Aguirre en un hospital”. Efectivamente, La presidenta de la comunidad de Madrid visitaba el hospital Ramon y Cajal, cuando fue abucheada por los trabajadores que exigen una sanidad cien por cien pública y la acusan de haber edificado en suelo público para “luego darles las camas a los que las gestionan por lo privado".

La televisión autonómica Telemadrid, cubría la noticia, y según 20 minutos, en el informativo del 23 de mayo de la cadena pública, no se emitieron las imágenes de la protesta por orden expresa y por escrito. En el minutado de dicha grabación se escribió: "Ojo! Las parte del abucheo no se puede vender", según informa este sábado El País.

Así Telemadrid, volviendo a ceder a los caprichos de la que parece todopoderosa Espe, sólo emitió el agradable paseo, la rueda de prensa y algún aplauso efusivo, pero desde luego ningún abucheo ni percance. La parte descaradamente censurada supuestamente por orden de la presidenta de la Comunidad, fue posteriormente colgada en youtube y en el video se puede ver como Aguirre ni corta ni perezosa se encara con los protestantes, con malas formas, comiendo chicle y riéndose. En actitud al más puro estilo barriobajero se les acerca a pocos centímetros de sus caras en un claro intento de imponerse que hace que algunos se separen hacia atrás. Una conducta lamentable de una presidenta, que puede permitirse tal comportamiento ante unas cámaras de televisión porque después puede también permitirse el lujo de censurar las imágenes.

Sin más dilación os dejo el video. Por cierto alguien debería decirle que no se dice "metros cuadraos" son cuadrados y que el chicle se come con la boca cerrada… vergüenza ajena me da tener semejante esperpento de presidenta de mi comunidad.

El video de “Esperanza se pone gamba”

Luego decimos de los chinos y que si son o no comunistas, y que si viven o no en una dictadura, pero ya ha quedado claro que en nuestra sociedad de libertades y democracia también cuecen habas, y queda visto que bien gordas. Los de aquí por lo menos no se ponen quinquis con el pueblo. ¡Espe, por favor, un poco de educación con la gente que te da de comer! Que sinvergüenza.